martes, 1 de abril de 2008

Tesoros en una Isla

La Evangelista, Kamaraco, Siguanaea, Isla de Pinos, Isla de la Juventud, como queramos llamarla, fue un territorio prácticamente incontrolable por la metrópoli española en Cuba por lo que fue refugio de los corsarios y piratas en sus correrías por el Caribe y en sus ataques a las colonias de entonces. Ubicada al sur de la Isla de Cuba, es la segunda isla de importancia en el archipiélago. Como accidentes geográficos tenemos la famosa Cienaga de Lanier, con una abundante vegetación y una fauna impresionante y una población con una singular mentalidad isleña muy abierta y liberal. Su capital Nueva Gerona posee el encanto de las capitales pequeñas y vinculadas al mar. Es común la práctica del buceo, pesca deportiva, kayak y demás deportes de mar. Ahora les comento otros encantos más importantes de la Isla y también detalles de su oscura historia.

Alberga la isla una colonia norteamericana de inicios de siglo XX con típicas casas al estilo ingles y muchísimos habitantes y descendientes tanto norteamericanos, canadienses, como europeos que le dan una sensación de cosmopolitismo y de aires de libertad, el isleño esta acostumbrado a convivir con culturas de ambos mundos y también asimiló la emigración china que se estableció en la gran migración de 1912 de esta mano de obra barata que abundo en la Isla. Tanto podemos encontrar un mallorquín, un canario que un norteamericano, todos enamorados de su Isla.

De su historia oscura existen leyendas de tesoros enterrados por los piratas y que fuera visitada por Francis Drake, Henry Morgan que llegaron a esconder aquí miles de tesoros. Hay muchísimas leyendas de aparecidos y desaparecidos buscadores de tesoros. En muchas historias se cuentan verdaderas expediciones realizadas por el pueblo llano que bajo el criterio de algún ciudadano que decía saber donde estaba un tesoro, producto de un secreto mapa o comunicación con el más allá se enrolaban varios en su búsqueda, y cuentan que si iba uno en la expedición con animo egoísta, solo encontraban en el hueco en la tierra, carbón. Y muchas historias parecidas podrás encontrar al intercambiar con los pobladores más antiguos de esta ínsula.

Esta Isla fue la prisión perfecta, por lo que un sitio a visitar es el Presidio Modelo existente aquí actualmente como museo, pero les cuento historias. Fue una penitenciaria de alta seguridad siendo casi imposible escapar de ella y los que lo intentaban se encontraban la ciénaga y mosquitos, un poco más allá el mar, muchos murieron buscando una ansiada libertad, tragados por las aguas de esta ciénaga o muertos de hambre y sed. El comedor inmenso y es algo que el visitante aún puede presenciar se le llamaba, de los mil silencios según se cuenta no podía sonar ni una cuchara cuando los reclusos efectuaban la comida y aún es impresionante cuando se visita. En este lugar estuvo Pablo de la Torriente Brau, también en ella estuvo preso Fidel Castro después de ser juzgado por el ataque al cuartel Moncada en 1953 y los demás miembros de la generación del Centenario. En esa cárcel se forjo una generación de cubanos que amantes de la democracia soñaban liberar a su patria y se mantuvieron firmes ante el dictador Fulgencio Batista. Una anécdota curiosa de la época cuenta que el dictador visita el penal, Fidel y los demás presos políticos comenzaron a cantar el Himno nacional y el himno del 26 de Julio para que él lo escuchase, fue un acto de rebeldía del grupo de jóvenes contra la dictadura que torturaba y mataba a sus opositores después de traicionar la excelente Constitución del 1940 en Cuba, ejemplo de constitución democrática de la época que reconocía a la mujer el derecho al voto y otras libertades cívicas, que fueron traicionadas por Fulgencio Batista en su golpe de Estado de 10 de Marzo.

También hay que decir que en la década de los 70, se habilito planes de escuelas viniendo a esta Isla a estudiar miles de jóvenes de países de África y América Latina que por su situación económica en dichos países no podían tener acceso a la educación y encontraremos a muchos de ellos que aún guardan en sus corazones el recuerdo de aquella Isla que les hizo pensar. En una ocasión en un chat conocí a un nicaragüense que había estudiado aquí desde muy pequeño, quién aún después de 20 años hablaba de su estancia aquí como algo inolvidable y se había prometido visitar esta Isla nuevamente con sus hijos. Por el momento no voy a continuar, hay tesoros en estos momentos que distan tanto de los dejados por los Bucaneros, Piratas y Corsarios, son estos tesoros que llevamos en nuestro corazones, llenos de amor y ternura por esta Isla, tesoros que ni aún con los mapas más secretos se podríamos llegar a estos, tesoros de isleños. Por lo que haré una invitación gigante, visiten la isla de Pinos o de la Juventud como quieran llamarla, en ella algunos han sufrido, otros tienen sus momentos más felices y otros quizás encuentren lo que siempre han anhelado.

2 comentarios:

Massimo Barba dijo...

En los años 30 guardaron prision en la entonces Isla de Pinos el futuro presidente de la Republica, Ramon Grau San Martin y el italiano Segundo Curti Messina, que en nos años 40 ocupò los cargo de ministro de la gobernacion y de la defensa.
Relatan algunos historiadores que con la II Guerra Mundial, aleman y italianos, residientes en Cuba, fueron exiliados en la Isla, ya que eran ciudadanos de potencias enemigas.

lixig dijo...

Gracias Massimo, es cierto además aquí en la isla existía una fuerte colonia de japoneses y alemanes que habían adquirido la nacionalidad norteamericana y en aquel periodo por la fobia bélica existente por todo lo relacionado con el triángulo Roma-Berlín-Tokio, estos ciudadanos fueron tratados como verdaderos enemigos y muchos enviados a campos de concentración en Europa.